Hoy han pasado 3 meses desde que presentamos una instancia a través de la sede electrónica del Ayuntamiento solicitando la publicación en el Portal de Transparencia del Plan de Ajuste o en su defecto que se nos permitiera acceder presencialmente al documento. Sin respuesta. Silencio administrativo.
Un documento aprobado a escondidas la mañana del 13 de septiembre de 2021, en plenas fiestas patronales. Tras diez meses el equipo de gobierno sigue sin encontrar un hueco para explicar a los ciudadanos el compromiso que han adquirido con el Ministerio para la próxima década, como condición a la solicitud de nuevos préstamos.
Nuevos préstamos para hacer frente a la ‘sorpresa’ de tener que devolver la aportación para el centro comercial de la Peña Rubia, junto con el resto de hipotecas que arrastramos (en total 9,5 millones). No tenemos dinero para pagar las deudas de este 2022. A esto hay que sumar 3 millones de facturas sin pagar y los 3,5 millones que tocará devolver a la Comunidad por el auditorio.
Una situación por todos conocida, a la que nadie ha hecho frente en el pasado. Este equipo de gobierno tampoco, refinanciando la deuda para seguir gastando (incluso a sabiendas de que no tiene para pagar los servicios contratados). El plan, el de todos, siempre ha sido el mismo. Y para no variar se han presupuestado 420.000 € en festejos.
Eso sí, este año se van a subir las tasas por realización de actividades administrativas o de expedición de documentos, por derecho de examen, y por ocupación o aprovechamiento del dominio público. Un 10% en algunos conceptos, 171.500 € más se prevén recaudar (un 5,47% de aumento respecto a 2021). Están expuestas en la sección de ‘Procesos participativos’.
Procesos participativos… habrá que reírse. Aunque para la próxima legislatura viene lo gordo. Un 10% a los impuestos directos, otro 10% adicional el IBI si no dan las cuentas. Y la puerta abierta a más subidas. Se esperan más de 1.000.000 € de aumento de recaudación… una media de 100 € al año adicionales que pagará cada persona mayor de edad. Eso te hará menos gracia.
La realidad es la que es, la explosión ya está programada. Mientras tanto a callar, que nadie diga una palabra. Y se hacen llamar valientes… Solo tenemos dos caminos para afrontarla: o subir los impuestos o reducir el gasto. En Gestiona Cehegín apostamos por lo segundo, creando además mecanismos que dificulten el repetir los errores del pasado. Tú decides.