Ayer llegó la carta. Sin sorpresas para quienes llevamos tantos años denunciando la gestión de este Ayuntamiento. Hace solo 2 meses os decíamos lo mismo que refleja este documento.
El Ministerio califica nuestra situación financiera como ‘de riesgo alto’, pues ni se han aplicado las medidas firmadas en el Plan de Ajuste ni ninguna otra que vaya en el sentido de cuadrar las cuentas.
Que los ingresos están inflados y no se ajustan a la realidad… Que el remanente de tesorería vuelve a ser negativo… Que quedaron 1.000.000 € de facturas sin pagar cuando los préstamos eran para sanear las cuentas.
Resumiendo, que hay que aplicar ajustes por importe de más 1.500.000 €. Y la realidad es mucho peor que la que refleja este documento, pues en él aparece una deuda viva de 8.500.000 €, con asterisco.
En verdad acabamos 2023 con 10.700.000 € de deuda y 3.500.000 € más por devolver del auditorio. Es decir, la deuda real es de 14.200.000 €, superior al 100 % de los ingresos corrientes.
Y como recuerda el Ministerio su pago ‘gozará de prioridad absoluta’. Ni sueldos ni facturas a proveedores. Y no, esto no se arregla con la magia de los impuestos. ¡Para alcanzar esa cifra no da ni subiéndolos todos al máximo legal!
Mañana pleno de la empresa pública que gestiona los polígonos. En 2021 se vendieron dos parcelas por 80.000 €. En 2022 la actividad fue vender 3.800 € en oliveras para leña. Sí, no es un chiste. Y en 2023 sin actividad, 0 € de cifra de negocio.
Bueno, sin actividad no. Pagamos 8.000 € en servicios profesionales de gestión y recibimos unos 10.000 € de ingresos por arrendamientos. Que esa va a ser otra y bien gorda. ¡Manda croquetas! Pronto os damos detalles…
Y es que si llevamos años y años insistiendo en ajustar las cuentas, en hacer recortes y en ordenar las prioridades es para evitar la situación a la que unos y otros parecen querer condenar a nuestro pueblo, pues todos son conscientes de lo que tenemos.
¿De qué os vale tanta pelea por el asiento? ¿Creéis que quedando bien con los vecinos dejaréis un buen recuerdo? ¡Sed serios de una jodida vez! O nos ponemos todos, ya, a intentar arreglar este pastel, o el futuro de Cehegín será muy negro.