Este mes tuvimos acceso al avance de la liquidación del último trimestre de 2023. 15.218.000 € en obligaciones de gasto, 16.747.000 € en derechos de ingresos. Es decir, 1.529.000 € de balance positivo. ¿Qué bien, no?

Peeeero, los derechos de ingresos incluyen 3.323.000 € en préstamos. Gracias a ellos se pudo pagar a proveedores y bajar el periodo medio de pago, como nuestro concejal le recordó al PP hace unos días, cuando sacaban pecho de ello.

Si quitamos de la ecuación el dinero de los préstamos, la cuenta de 2023 parece que no será nada buena. Quedarían unos ingresos de 13.424.000 €. Esto arrojaría un balance negativo de 1.794.000 €. 

¡Y espera, que quedaron 900.000 € de facturas sin aplicar al presupuesto de 2023! Si las sumamos hablamos de más de 2.500.000 € de déficit presupuestario durante el último año. Vamos tó bien.

Tan bien que podemos saltarnos a la torera el borrador de presupuestos prorrogados que enviamos al Ministerio, porque del de 2024 seguimos sin poder hablar. Pusieron que 63.000 € en inversiones para todo el año… Solo en esta semana han anunciado inversiones por importe superior.

Y más allá de las inversiones, ¡que el ritmo no pare! Un evento con otro, una ocurrencia con otra. De tó, pa tós. Tú pide. Cualquiera diría que el único plan es intentar quedar bien con el mayor número de personas. Total, del Ministerio no contestan… y a saber lo que nos queda en el convento.

Del equipo de desgobierno al casi alcalde, del Camelot a la cantina del parque. ¡Culpa tuya! De eso ni hablar, ¡Culpa tuya, que estabas tú! Estaba yo pero no me dejaste… ¡Menos me dejas tú ahora! ¡Nos teníais que haber dejado a nosotros! ¡Cehegín solo necesita un poco de magia socialista!

Empresas sin llegar, otras camino de irse. Contratos en fraude de ley, al cajón año tras año. Situaciones previsibles a nivel de gestión que nadie anticipa. Y algún día nos dirá el Ministerio que hasta aquí… Solo pido que por favor le toque a otro, rezan todos. A mí no, por favor, a mí no. Estamos apañaos… ¡Que no pase ná!