La concejalía de transparencia, que dirige Alicia del Amor, (que no falte el nombre del concejal…) diseña una encuesta para saber cómo te imaginas el municipio en 2030. Un nuevo paripé que sumar a la lista de los procesos participativos desarrollados en la localidad. Puedes acceder a ella en este enlace.

Hablamos de la misma concejalía que lleva 5 meses sin publicar un contrato menor, que no publica los gastos en festejos o que tras firmar a escondidas la modificación del Plan de Ajuste y decidir refinanciar la deuda municipal no consideró necesario promover una rueda de prensa o informar a los ciudadanos.

Incluso llegan a preguntar si ‘encuentras con facilidad la información que necesitas buscar en la página web del Ayuntamiento de Cehegín’. Hay que tener valor para montar esta pantomima tras el nivel de transparencia y participación demostrado a lo largo de la legislatura.

5 preguntas personales y 33 preguntas de interés, 9 de ellas abiertas al comentario libre (lo que impide analizar o comparar los datos obtenidos). Una encuesta pésimamente diseñada, cuyos datos acabarán en la basura, directamente o tras alzarse como promesas electorales de algún candidato o candidata. Bien pensado.

Preguntas abiertas del estilo a qué zonas del pueblo mejorarías y por qué o cómo mejorarías la oferta cultural y de ocio en la localidad. De paso ya tenemos justificación participativa para cualquier cosa que se ponga en marcha de aquí a mayo. El pueblo lo ha pedido, ¿a qué sí?. Bien pensado.

Cierra la encuesta la pregunta abierta de ‘¿qué tres cambios o actuaciones te gustaría que fueran una realidad en Cehegín en 2030?’. Las nuestras son muy sencillas, nos ahorramos el mandároslas: 

• Un ayuntamiento saneado, capaz de atraer a empresas que generen empleo a través de bajadas de impuestos y la cesión gratuita de suelo industrial. 

• Unos políticos responsables, centrados en la gestión de los servicios básicos y no en malgastar el dinero y los recursos públicos buscando rédito político. 

• Una sociedad comprometida políticamente, que ponga fin a este circo sin gracia en el que se ha convertido la política y asuma de una vez las riendas de su futuro.