Cambios en la RPT. Aprobamos las enmiendas de PSOE y X Cehegín. A renegociar lo de la Oficina Técnica y eliminar la plaza del responsable de deportes. Dependían de nuestro voto, pero ni nos llaman. Diálogo predican.

Tras esto votamos en contra, pues defendemos otro modelo de Ayuntamiento. Y es que en 2022 entre sueldos y deuda gastamos 10.000.000 €. Los demás, a favor, aprobando la subida salarial para los trabajadores de limpieza y recogida de residuos.

Ellos se felicitan, nosotros la explicamos. 5.000 € al año, más otros 3.000 € apalabrados. El objetivo, 2.600 € brutos al mes en 12 pagas. Un trabajo esencial, pero para el que no hace falta cualificación. ‘Muchos de los vecinos querrían tener esas condiciones laborales’, afirmamos.

¡Perplejos se quedaron PP y PSOE! ¡Que no dignificamos el trabajo! ¡Que venimos del 1800! Lo que cambia la realidad siendo funcionario… Ni dignificamos a los trabajadores, ni dignificamos a los políticos. ¿Mira que querer quitarles unas subvenciones que no cumplen con la Ley?

El señor Gabarrón, ese salvapatrias solitario, solo busca embarrar los plenos. 2.720 € de dinero público van a recibir este mes los concejales del PSOE, pero ellos necesitan 80 € más. Veremos la contabilidad. Una tontería… pero con mucho simbolismo detrás. 

Acordamos arreglar la calle Begastri. Mérito del grupo municipal socialista, saltan los unos. Gracias a Paco Abril y López Miras, brincan los otros.

Que el Camelot sea municipal. ¿Cómo lo compramos, con qué dinero lo arreglamos, cómo es de prioritario? ¡La metralleta! ¡La metralleta de las preguntas! ¡Camaradas socialistas, disparen a matar!

Todos a favor de retirar el protocolo de acoso laboral para modificarlo. Presidenta, ¡exijo hablar! Grábame. Grábame 20 minutos hablando emocionado. ¿Es que nadie piensa en las víctimas?

Gracias señora presidentE. ¿Me habéis oído socialistas? Lo he dicho con E. ¡Pelea! ¡Pelea! Y la hubo al final. Es nuestro portavoz el que echa el barro, claro que sí. Otro muy digno espectáculo el que volvieron a dar.