Paralizar el gasto no básico, pagar la deuda, y empezar de cero con un nuevo proyecto político. Donde lo público se centre en los servicios básicos con total transparencia, y donde el gasto no básico esté en mano de los ciudadanos y colectivos de la localidad a través de herramientas de participación ciudadana. Impuestos al mínimo y todas las medidas posibles para promover la generación de empleo. Oportunidades para emprender en deporte, cultura, formación,… en un entorno de libre competencia, donde desde lo público dediquemos el dinero que pagamos por tener casa o coche a ayudar a quien de verdad lo necesite. Este es nuestro proyecto político. Y empezar a andarlo es posible… estas son las cuentas.