El pasado lunes la televisión regional informó de que Jerónimo Moya ‘estaba a la espera de recibir una respuesta a la propuesta que le hizo al PSOE y a la espera de reunirse con el PP’. Y que desde el PSOE ‘no se cierran a crear un gobierno junto a otro partido’, algo a lo que también estaría dispuesto el PP, pese a preferir ir en solitario.

Según se oye por ahí la propuesta de X Cehegín lleva unos días en la mesa de PP y PSOE, la misma para los dos partidos. Dicen los rumores, a saber por quién difundidos y con qué intención, que Jero pide tener la alcaldía dos años, la liberación de sus tres concejales y que el cuarto concejal liberado, uno solo para la otra formación, lo esté al 50%.

No sabemos si esta información es cierta o no, pedimos a los implicados que aclaren si es así o si falta alguna información relevante. Solo se sabe lo trasladado por la 7RM, que ningún partido ha tenido la deferencia de comentar nada públicamente, y que los rumores de negociaciones maridan bien con el silencio actual. Callan porque algo esperan escuchar.

Si las habladurías se acercan a la realidad la situación es muy preocupante. Un partido minoritario que pone una propuesta injustificable encima de la mesa, trasladando el mensaje de que sus votos tienen un precio. Dos partidos mayoritarios cuyo silencio muestra su predisposición a entrar en la puja. Esto no va de medidas y proyectos, va de otra cosa.

Será muy difícil justificar tanto un pacto entre formaciones como la ausencia de él. Los tejemanejes y el secretismo no ayudan ni a legitimar un potencial acuerdo ni a explicar de forma creíble por qué no se dio. Todo apunta a que PP, PSOE y X Cehegín irán el sábado con tres discursos distintos, por si a última hora se produce algún cambio de opinión. 

A tiempo estáis de cambiar de postura… ¡Publicad las propuestas realizadas o recibidas! ¡Contad todo lo hablado! ¡Haced públicas vuestras líneas rojas y qué medidas consideráis innegociables! Y ya luego negociáis lo demás a última hora, en la escalera o en el baño. Solo os pedimos un ‘de aquí no paso’. Por respeto a vuestros votantes.