El pasado 13 de septiembre se aprobó en pleno extraordinario un nuevo Plan de Ajuste con el que adherirnos a los Fondos de Ordenación para el año 2022. Ni se anunció públicamente ni ha sido comentado por ningún medio de prensa local o partido político. Total, ¿a quién le importa?

El objetivo es convertir las deudas a pagar en los próximos meses en deuda a largo plazo, de forma que tengamos liquidez para abordar esos pagos, podamos mantener el nivel de gasto público a medio plazo y consigamos reducir el periodo medio de pago a proveedores (actualmente por encima de los 100 días).

Vamos a refinanciar un total de 3.650.632,67€ que se desglosan en los siguientes bloques:

➖Vencimiento de préstamos en 2022 por importe total de 629.117,44€.
➖Refinanciación del préstamo ICO para el fondo de pago a proveedores por cuantía total de 825.652,06€.
➖Financiar la ejecución de sentencias judiciales (principalmente la devolución de los 1.800.000€ que Habitalia pagó en 2014 más 300.000€ de intereses) por importe total de 2.195.863,17€.

Como contrapartida se ha desarrollado un nuevo Plan de Ajuste, que deberá ser revisado y aprobado por el Ministerio de Hacienda. Durante el pleno se comentaron las siguientes medidas, a implementar a partir de 2023:

➖Actualización de todas las tasas públicas con el incremento del IPC acumulado de los últimos 10 años, un aumento del 10%.
➖Subida del IPC acumulado, 10%, a todos los impuestos directos (IBI de todo tipo y circulación de vehículos).
➖Subida adicional del 10% del IBI en el año 2025.

Esta legislatura ya ha subido un 17% la tasa del agua. Y en 2023 subirán un 10% todas las tasas públicas e impuestos locales… más otra subida adicional del 10% en el 2025.

A los 3,5 millones que empezaremos a devolver del Auditorio tendremos que sumar otros 3,6 millones más. Más de 7 millones de euros de deuda a largo plazo solo con estas dos operaciones.

Un sistema público cuyo gasto en personal asciende a 6,7 millones de euros, gasto que cada año aumenta al ritmo del IPC, como los sueldos privados en la localidad (evidentemente es ironía).

Servicios deficitarios y subvencionados para todos. Cada año gastamos más de 500.000€ en educación, cultura y festejos o más de 500.000€ solo en personal relacionado con las actividades deportivas.

Una economía pública en números rojos; uno de los pueblos con más paro de la Región. Patada palante. Subamos los impuestos, que podamos seguir luciéndonos. A pasear al río, a cantar al auditorio. Y futuro solucionado.